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llueve
llueve como la puta madre
llueve como la puta madre que los remilparió
llueve
llueve como la mierda
llueve mierda
llueve
lluve afuera
llueve adentro
llueve en toda la casa
donde llovía antes y donde no llovía nunca
llueve llueve y llueve
agua por todas partes
en todos los rincones
rebalsan las rejillas
los desagües
las alcantarillas
rebalsan los nervios
la angustia
la bronca
llueve
contra quién tirarse
a quién putear
a quién querer matar
estrangular
trompear
cagar a puteadas
el cielo
llueve desde el cielo
el cielo y su dueño dios
dios y la puta que los parió dios
qué pasa que hacés llover tanto
qué necesidad había
lluvia de mierda
lluvia de nervios
lluvia de trapos baldes y palanganas
lluvia de mierda
lluvia en los rincones
en las esquinas sobre las ollas
sobre los muebles
sobre la ropa
sobre las plantas
sobre las sillas
llueve en la cocina
en el pasillo
en los cuartos
en el baño
en la escalera
llueve adentro
llueve en el cuerpo
llueve y se cae el mundo
llueve

HAIKU

La luna en cuarto menguante
minifaldas y obreros toman
el mismo tren de la mañana

MICRO RELATO

Los Horribles vivían felices y contentos con toda su mugre y su olor a cuestas. Olían como la mierda y estaban llenos de defectos físicos. Las casas de piedra roja crecieron y los Horribles creciueron con ellas. Un día los Horribles cruzaron todos juntos las vías, el alambrado, el gran parque, la avenida... el ataque a las torres duró segundos. Ese día los Horribles se quedaron con todo.